Cómo cuidar tu circulación sanguínea en los vuelos

22 Mar Cómo cuidar tu circulación sanguínea en los vuelos

Los vuelos largos pueden poner a prueba nuestra circulación sanguínea debido a la falta de movimiento y la presión en cabina. Mantener una buena circulación es crucial para evitar incomodidades como los dolores en las piernas o, en casos más graves, problemas como la trombosis venosa profunda. Aquí te dejamos algunos consejos para cuidar tu circulación mientras viajas en avión.

Muévete regularmente: Aunque no puedas caminar por el avión, hacer movimientos simples con los pies y las piernas puede ayudar a mejorar la circulación. Flexiona los tobillos, estira las piernas y mueve los pies en círculos cada 30 minutos. Estos pequeños ejercicios estimulan el flujo sanguíneo y previenen la rigidez.

Usa ropa cómoda y suelta: La ropa ajustada puede dificultar la circulación. Opta por prendas cómodas y holgadas, especialmente en las piernas y los pies, para facilitar el flujo sanguíneo. Considera también el uso de medias de compresión, que ayudan a mejorar la circulación y reducen el riesgo de hinchazón.

Hidrátate bien: El aire en la cabina suele ser muy seco, lo que puede provocar deshidratación. Mantente bien hidratado bebiendo agua regularmente. Evita bebidas alcohólicas y con cafeína, que pueden aumentar la deshidratación.

Evita cruzar las piernas: Aunque puede ser cómodo, cruzar las piernas durante largos períodos puede restringir el flujo sanguíneo. Trata de mantener las piernas relajadas y estiradas para favorecer la circulación.

Mantén una postura adecuada: Evita estar encorvado durante el vuelo. Siéntate derecho, con los pies apoyados en el suelo, y cambia de posición de vez en cuando.

Siguiendo estos simples pasos, podrás cuidar tu circulación sanguínea durante los vuelos, haciendo tu experiencia más cómoda y reduciendo riesgos para tu salud. ¡Viaja de manera inteligente y mantén tu bienestar en el aire!